Cuando no sabes que hacer con tu vida

Al participar en el trabajo voluntario, conoces personas interesantes, motivadas y positivas. Además, te ayudará a descubrir aspectos más profundos dentro de nosotros mismos que muchas veces nos ayudan a darle más sentido a nuestra existencia. Si no sabes qué quieres hacer con tu vida, esta fase suele ser muy catártica, muy liberadora y satisfactoria.

Todos hemos querido hacer algo, pero no siempre hemos encontrado el coraje para hacerlo realidad. Las razones pueden ser desde “No tengo tiempo” hasta “¿Qué dirán?” o “¿Cómo hago esto a mi edad?” Si estas afirmaciones aparecen en tu cabeza con frecuencia, reinicia mentalmente y elimina el “no puedo” o el “perdí el tren” sobre ciertas cosas.

Fomenta tu talento

Tienes excelentes habilidades en varias áreas. Sabemos que tienes tus propios talentos y habilidades que te diferencian de los demás y te dan una sensación de eficacia personal.

Lo que sucede es que a veces olvidas tu potencial y tu diálogo interno negativo te dice que no eres tan bueno como crees.

Afecta tu estado de ánimo y tu autoimagen hasta el punto en que sientes que tu vida está perdiendo sentido. Es hora de cambiar este enfoque y recordar tus fortalezas personales (empatía, creatividad, determinación, sensibilidad, confianza en ti mismo, etc.). Todos estos son nutrientes que te darán moderación en tiempos de incertidumbre. Hazlo, reconoce tus talentos y tu valor.