Qué hacer para que la ropa no se arrugue
Hay varias maneras de evitar que la ropa se arrugue, incluyendo las siguientes:
- Planchar la ropa antes de ponerla en el armario.
- Doblar y colocar la ropa en cajones o estantes sin apretujarlas.
- Usar protectores para cajones y perchas para evitar que la ropa se arrugue mientras se almacena.
- Colgar la ropa en perchas especiales que ayudan a mantener la forma.
- No apilar demasiada ropa en una percha o en un cajón.
Es importante tener en cuenta que algunos materiales, como el algodón o el lino, son más propensos a arrugarse que otros, como el poliéster o el spandex. En este artículo te vamos a dar una serie de consejos que son necesarios para saber que hacer para que la ropa no se arrugue:
- 1. Usa vapor
- 2. Póngalos en la secadora
- 3. Déjalos reposar
- 4. Enróllalos en un rollo
- 5. No lavar en lavadora llena.
1. Usa vapor
Una forma versátil de planchar ropa muy arrugada es usar el vaporizador o colgarla en perchas para vaporizarla.
El vapor puede ser dirigido (desde una tetera hirviendo) o difundido (por ejemplo, en el baño). Estos son buenos para colgar cosas hechas de materiales que son muy sensibles al planchado en caliente para que puedan tomar su forma original.
No esperes una suavidad perfecta: si el pelaje tiene arrugas profundas, lo más probable es que no desaparezcan.
También es importante tener en cuenta que este método no es adecuado para telas que encogen mucho: pueden encogerse cuando se exponen al vapor caliente.
2. Póngalos en la secadora
¿Qué haces con la ropa que no se puede planchar o lavar en seco? Hay una manera más suave de suavizarlos. Simplemente coloca la prenda mojada en la secadora, aplana a mano y deja que se seque por completo.
No te olvides de rotarlo de un lado a otro con regularidad. El secado húmedo actúa como un agente suavizante y la ropa queda más limpia en general.
3. Déjalos reposar
Es posible que la ropa se haya guardado en una maleta muy apretada o se haya doblado accidentalmente en un armario y se haya quedado atrapada con otros artículos. En este caso, la ropa se puede devolver a su forma original colgándola en perchas y dejándola allí durante un par de días.
La tela se estirará ligeramente por su propio peso y algunas arrugas serán menos visibles. Este método es adecuado si no tiene prisa por usar esta prenda y está dispuesto a esperar un poco.
No olvides colgar prendas de tejidos pesados o fácilmente deformables, como la lana o el cachemir, sobre los hombros finos. Se doblarán y el área del hombro se deformará gravemente.
4. Enróllalos en un rollo
Acostúmbrate a guardar las cosas hechas con telas difíciles de cierta manera. Deben doblarse de modo que queden un mínimo de pliegues y arrugas. Es mejor mantenerlos en rollos. Esta opción es útil para el hogar y los viajes.
La ropa enrollada de esta manera ocupa menos espacio y se arruga menos. Y cuando los sacas, permanecen allí por un tiempo antes de volver a su lugar.
Esto se aplica incluso a la ropa que estaba en cajones estrechos o en maletas. Al doblar la ropa, trate de mantener las costuras lo más uniformes posible y alise las arrugas o protuberancias.
5. No lavar en lavadora llena.
Para evitar este problema más adelante, es una buena idea evitar todas las situaciones en las que la ropa pueda arrugarse.
Por ejemplo, no pongas un vestido de seda o viscosa en el tambor de una lavadora llena. Sí, esta ropa es liviana y compacta y es probable que le quede bien incluso cuando está completamente cargada.
Probablemente no le guste lo que sale del tambor después. Además, los artículos delicados requieren un ciclo de lavado más suave por separado, de lo contrario corren el riesgo de dañarse.
Una regla simple: cuanta menos ropa haya en el tambor, menos arrugada estará. Mientras que una camiseta de algodón se puede planchar sin problema, las prendas delicadas se deben lavar a máquina no más de dos tercios del ciclo completo.